La historia de estas dos chicas parece sacada de una película de Disney o un cuento con final feliz, pero no es así; sucedió en la vida real y están tan emocionadas que han querido compartirla con el mundo a través de sus redes sociales.

Las protagonistas de esta historia son Julia Tinetti y Cassandra Madison, dos chicas estadounidenses de 32 y 31 años que se conocieron en 2013 porque trabajaban en el mismo restaurante de la ciudad de New Haven. Desde el primer momento sintieron una conexión muy especial, además, ambas llevaban tatuadas la bandera de la República Dominicana, el país del que eran originarias; esto, todavía, las unió más.

Según ha contado Julia Tinetti a Good Morning America, poco a poco empezaron a hacer más planes juntas y se convirtieron en mejores amigas. Es más, incluso empezaron a vestirse igual y sus compañeros de trabajo bromeaban con la posibilidad de que fueran hermanas, no solo por eso, sino también por su parecido físico. No obstante, ellas nunca pensaron que esto pudiera ser real, simplemente era algo de lo que se reían a menudo en el trabajo.

Eran tantas las similitudes existentes entre las dos amigas que, al ser las dos adoptadas, decidieron comparar sus documentos de adopción para comprobar si había algún tipo de conexión entre ellas, pero no: "Éramos de dos ciudades diferentes con apellidos diferentes. Y los nombres de nuestras madres en nuestra documentación eran diferentes", ha contado Julia.

Aún así, ambas decidieron seguir investigando, ya que las dos habían nacido en la República Dominicana, casi el mismo año, y su parecido, sobre todo en las fotografías de cuando eran pequeñas, era más que evidente.

Los años pasaban y ellas seguían con la intriga de si tenían algún parentesco en común. Cassandra quería saber algo más de su familia biológica y su madre adoptiva le regaló un test de ADN. Viajó a su país de origen y conoció a algunos de sus familiares biológicos, entre ellos, a su padre, al cual le preguntó si ella tenía hermanos biológicos y si habían dado algún otro bebé en adopción.

Sin embargo, este no quiso responderle, solamente le dijo que habían sido años duros para ellos y que, por tanto, prefería no hablar de ese tema con ella. Así que, en esa visita no logró recabar muchos más datos y la única opción que les quedaba para despejar sus dudas es que Julia se hiciera también un test de ADN.

Pues bien, precisamente eso fue lo que hizo Julia Tinetti, un test de ADN para descubrir por fin si su familia biológica era o no la misma que la de su amiga. Los resultados de la prueba los recibieron el 28 de enero y con ellos llegó la noticia que cambiaría su vida para siempre: son hermanas de padre y de madre.

Cassandra y Julia, que se habían encontrado hace años trabajando, habían descubierto, no solo que eran hermanas, sino que tienen siete hermanos más que sus padres no dieron en adopción. El motivo por el que al principio no coincidieron sus datos en los documentos de adopción es que estos se traspapelaron.

A veces, como le ha pasado a Julia y Cassandra, encuentras a tu hermana biológica por casualidad, en otras ocasiones, si quieres dar con ella, tienes que buscarla activamente y no siempre serás capaz de conseguirlo. Es por eso que hay personas que acuden a determinados programas de televisión para comprobar si de esta manera el proceso resulta algo más sencillo.

Este es, por ejemplo, el caso de Rocío, que fue al programa 'Hay una cosa que te quiero decir' y pudo, por fin, conocer (a sus 62 años) a María Pilar, su hermana biológica: