La adolescencia es una edad muy complicada en la que se forma nuestra personalidad, pero también un momento en el que nos gusta hacer travesuras y rebelarnos contra lo establecido (en la gran mayoría de ocasiones por nuestros padres).

A esta edad es también muy común empezar a sentir inseguridades con respecto a nuestro físico y un momento en el que muchos jóvenes tienen que hacer frente al bullying. Pues bien, Samm Jane, una madre de 32 años, ha contado que se enteró de repente, porque le llamaron desde el colegio, de que uno de sus tres hijos le estaba haciendo la vida imposible a una compañera de clase.

A Jane la llamaron desde el centro escolar para informarle de lo que estaba ocurriendo con su hijo de doce años y nada más llegar el preadolescente a su casa le pidió el teléfono móvil para revisarle los mensajes y comprobar si era cierto que había estado acosando e insultando a una niña de su clase.

Y, efectivamente, desde el centro estaban en lo cierto, el hijo de Jane le había escrito a su compañera: "no quiero ver tu cara fea en el colegio", "tu cara y tu cuerpo feo me ofenden" o "vete a llorar a tu esquina, como un bebé"; además de otros insultos sobre su físico.

Nada más enterarse de lo ocurrido y comprobar que era cierto que su hijo había estado haciendo bullying a una de sus compañeras, le obligó a comprar chocolatinas y flores con parte del dinero que le habían regalado por su cumpleaños para dárselas a la niña.

No obstante, además de estos regalos, el joven le pediría perdón en persona. La madre tuvo que explicarle también las consecuencias que podrían tener sus palabras en el autoestima de la pequeña: "Le dije a mi hijo: 'Se va a mirar en el espejo ahora mismo y se sentirá muy insegura'. Le expliqué cómo las personas se suicidan o se auto lesionan por lo que dice la gente. Tenemos que crear la próxima generación. Sería mucho más fácil si los padres enseñaran a sus hijos e hijas a disculparse y hacer las paces".

"Quería compartirlo para que otras personas pudieran verlo y pensar: 'No quiero que mi hijo sea así'. Soy madre soltera y criar a un niño para que sea un hombre es bastante difícil'", concluye Jane.

Ahora, en los últimos días, el vídeo de Jane se ha vuelto muy viral, han sido muchas las personas que han aplaudido la rapidez de la madre y que haya sido tan tajante con su hijo, al que además le ha explicado las consecuencias que pueden tener actos como los que estaba llevando a cabo en la salud tanto física como mental de su compañera: "Gracias en nombre de esa chica. He tenido el mismo problema con un par de niños que le dicen lo mismo a mi hija y a sus padres no les importa", escribe por ejemplo una de sus seguidoras.