Saber si tenemos el coronavirus sin tener que acudir a un centro sanitario ni a una farmacia parece algo imposible, pero al parecer no lo sería tanto. Diagnosticarse a uno mismo de la COVID-19 suena a futuro, pero es algo que va a ser realidad en Alemania en tan solo unos pocos días. Concretamente, a partir del 3 de marzo.

Se ha llegado a esta fecha y a esta posibilidad tras la aprobación por parte del Instituto Federal de Medicamentos y Productos Sanitarios alemán (BfArM) a tres fabricantes de pruebas rápidas de antígenos. El objetivo es que la capacidad de detección del covid aumente y que sea más sencillo acceder a todo esto. ¿De qué forma? Tan sencillo como dándose una vuelta por el supermercado. Vamos, de camino a por desodorante, naranjas o gel desinfectante se echará al carro también esta prueba casera, por si acaso.

Sí, la idea es que estas tres pruebas aprobadas que son muy similares y funcionan de la misma manera nos resuelvan la papeleta de saber si estamos contagiados porque su mecanismo es muy parecido (y también la forma) a una misma prueba de embarazo en la que con una muestra y esperando unos pocos minutos se sabe el resultado. En este caso, la muestra no implica la extracción de sangre. Es mucho más sencillo que todo eso. Aquí se hace a través de un hisopo de algodón que se mete en la nariz (basta con que sea en la parte inferior, no hace falta que el el palo toque el cerebro) y después toca esperar unos 15 ó 20 minutos.

Así de sencillo resulta esta detección del coronavirus y de la manera más asequible de todas. Sin embargo, ya advierten que esto no es milagroso. Por lo pronto, estas tres pruebas rápidas de antígenos caseras tienen una precisión media de diagnóstico del 80%. Existe todavía un amplio nivel de fallo y esto, por supuesto, que no exime de que se cumplan el resto de medidas de prevención, tal como las autoridades gubernamentales ya han manifestado.

Al contar ya con una fecha para encontrar en Alemania estas pruebas caseras para el covid en los estantes de algunos supermercados, ha surgido la duda de cuál será su precio y si estas se subvencionarán en un futuro para llegar todavía más lejos y de forma masiva. Con todo en el aire todavía, el Gobierno alemán sí que ha dado una ligera idea de cuál será su plan y este tiene que ver con la implantación de estos test masivos de fácil adquisición en las escuelas infantiles.

La otra gran incógnita es el precio. ¿Por cuánto saldrá el ir al supermercado a por un test de antígenos? Una cifra que no se ha filtrado todavía al público general, aunque se cree que los tiros irán por entre 5 y 10 euros y en torno a los 18 si se trata de un kit especial, según documentos gubernamentales a los que ha accedido Reuters.

Lo que sí se tiene seguro es que estos test no van a hacer que se baje la guardia y que se siga manteniendo la política de reducción de contactos. Se educará al público en que, en caso de dar positivo, el individuo tendrá que aislarse y esperar a hacerse un test de PCR de laboratorio, aunque esto dependa de cada uno mismo. No habrá nadie encargado de ver el resultado que nos ha salido en nuestra casa. Algo que se ve como su principal problema y por lo que han saltado las alarmas, aunque desde el gobierno han venido a tranquilizar insistiendo en que el objetivo ante todo es "mejorar la seguridad cotidiana".

En este nuevo universo de pandemia hay que estar de lo más preparados. Porque lo mismo uno va a una cita y se lleva uno un test de antígenos, que también puede acabar en el supermercado (tal como apunta el futuro) y echa al carro estas pruebas caseras, por si acaso. Ante este panorama que estamos experimentando y lo que se nos viene de nuevo, no hay duda que lo mejor es estar informado y saber cómo funcionan estos test test de antígenos para tener por lo menos eso ya ganado.