Jaime Lorente y Miguel Herrán han alcanzado el éxito si por éxito entendemos vivir gracias a los ingresos su profesión como actores, tener el reconocimiento del público y poder escoger los papeles en los que quieren trabajar en el futuro. Muchos estarán pensando que son exitosos porque también han logrado la fama, con la que sueñan muchos artistas y que ellos han conquistado con menos de 30 años (Lorente tiene 29 y Herrán 25) gracias a su participación en dos fenómenos mundiales, 'Élite' y sobre todo 'La casa de papel'.
Dar vida a Denver y a Río les ha hecho conocidos en todo el mundo, ya que la serie que narra el atraco a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre se convirtió en un bombazo de manera inesperada cuando sus dos primeras temporadas llegaron a Netflix: logró ser la serie más vista de habla no inglesa y actualmente figura en el top 5 de las más vistas de su catálogo (ocupa la cuarta posición).
Pero la fama no ha sido para ellos ningún regalo, como han explicado en una entrevista para ICON El País, en la que han reflexionado sobre las consecuencias de esta y han asegurado que no tienen ninguna intención de marcharse de España para trabajar. ¡Te contamos en Yasss lo que han dicho Jaime Lorente y Miguel Herrán!
No es ningún secreto que ni Jaime Lorente ni Miguel Herrán jamás habían soñado con hacerse famosos, ya que ambos han contado en varias entrevistas que su deseo era poder hacer carrera en el mundo de la interpretación, pero que no tenían la pretensión de convertirse en las estrellas que son ahora, que todo el mundo les reconoce por la calle y no solo en España, sino también en Brasil, Alemania o Argentina, países en los que ha triunfado la serie.
En la entrevista que le han concedido a Juan Sanguino, la pareja de actores ha explicado que han vivido situaciones muy impactantes debido a la fama de 'La casa de papel', como estar disfrutando del mar en una lancha y que la gente nadase hasta allí y se subiera a la lancha para conocerlos, que los yates les persiguieran cuando estaban navegando o quedarse encerrados en un restaurante por la cantidad de fans que había en la puerta y que tuviera que acudir la policía para desalojar el pueblo.
Miguel, que ha explicado que a algún compañero "se le piró un poco la cabeza" con la fama repentina, ha confesado que el éxito de 'La casa de papel' le hizo dudar sobre si le cogían para nuevos proyectos porque había dado vida a Río y era muy conocido y seguido en Instagram (tiene más de 13 millones de followers) o si los directores le querían fichar por su valía como actor.
"Cuando te llegaba un proyecto tenías claro que te habían cogido por tu talento, confiabas más en ti mismo y en tus herramientas. Ahora siempre dudo si me cogen por mí o por la imagen que se vende de 'La casa de papel'", ha confesado en ICON, donde también ha comentado que como sus dos papeles más conocidos por el público son en dos series de Netflix ha tenido miedo de que le encasillaran en ese rol: "A veces he tenido la sensación de ser un actor Netflix".
Miguel, que ya reconoció en otra entrevista que el dinero no le había hecho feliz, también ha explicado que "odia" que la gente le chiste por la calle al grito de su personaje en la serie y que no se interesen por cómo está, ya que presuponen que al ser mundialmente conocido todo le va bien: "De toda la gente que se te acerca muy poca te pregunta qué tal estás, asumen que estás de puta madre porque eres famoso".
Por su parte, Jaime Lorente (que va a ser padre de una niña, según la revista ¡HOLA!), ha explicado que a él tampoco le gusta la fama y que, de haberle gustado, podría haber cambiado mucho tras el bombazo de 'La casa de papel': "Es que tú puedes ser un actor al que no le gusta la fama o puedes ser un actor al que sí le gusta. Y si te gusta y te ocurre un fenómeno así hay un 99% de posibilidades de que acabes volviéndote un gilipollas". Añade, además: "El éxito es más difícil de gestionar que el fracaso, porque el fracaso se te olvida pero el éxito no te lo puedes quitar ni con aguarrás".
Miguel y Jaime también coinciden en su deseo de seguir trabajando como actores en España. En declaraciones a ICON El País, Lorente ha dejado claro que ve muchas cosas positivas en nuestro país y que no tiene pensado marcharse: "Yo no me quiero ir, ¿por qué me voy a querer ir? Hacemos cosas que son la hostia, vivimos en un país que es la hostia y ahora mismo tenemos una especie de responsabilidad. Mi país me ha dado mucho". Su compañero coincide: "Como actor español quiero apostar por la industria de mi país. O sea, ¿me das el éxito y cojo y me piro con él? [...] Si puedo elegir, me quedo aquí".