Isabel Medina Peralta solo tiene 18 años y ya es dirigente de la recién resucitada Sección Nacional Femenina de Falange. No es ningún mérito, ya que esta organización había sido disuelta en el año 1977 con el Real Decreto Ley 23/1977 por su ideología fascista y como parte del desmantelamiento del Régimen Franquista durante la Transición Española. Ella solo tuvo la idea de resucitarla.
Durante el homenaje a la División Azul que tuvo lugar el pasado 13 de febrero en Madrid y que congregó a unos 300 neonazis que realizaron el saludo nazi en repetidas ocasiones y cantaron canciones de temática fascista, Isabel Peralta logró destacar por sus palabras durante un discurso claramente antisemita que, gracias al altavoz de las redes sociales, se hizo viral. La magia de internet: unas palabras que solo deberían haber escuchado 300 personas ahora han dado le vuelta al mundo.
Así fue el discurso que se ha hecho viral a través de las redes sociales:
A raíz de esto, Isabel se ha convertido en el foco de atención tanto de los medios de comunicación (algunos, como La Razón, la han llegado a llamar "musa falangista") como de las redes sociales. Su cuenta en Twitter ha crecido hasta los 10.000 followers en los últimos días.
La joven ha concedido varias entrevistas a diferentes medios en los que ha dejado conocer un poco mejor tanto su personalidad como su ideología. Si costaba creer las palabras de su discurso viral, en las que dijo cosas como "el enemigo que siempre va a ser el mismo, aunque con distintas máscaras: el judío. Porque nada hay más certero que esta afirmación: el judío es el culpable", declaraciones como que está enamorada del fascismo o que admira a Hitler y niega el holocausto resultan increíbles.
Pero no lo son. La realidad es que existen personas en nuestro país que son antisemitas y que se creen herederas de los mensajes y acciones de Adolf Hitler, responsable del genocidio de millones de personas en Europa durante la Segunda Guerra Mundial como "solución final" a la "causa judía". Campos de concentración como el de Auschwitz siguen en pie convertidos en monumentos históricos precisamente para recordarnos que esto ocurrió, que fue terrible, y que no debería volver a pasar.
Por eso en Alemania, entre otros símbolos nazis, está prohibido el saludo fascista, mientras que en España hemos podido ver, gracias a las imágenes virales, como cientos de personas lo realizaban, o cómo Isabel Peralta habla con varios medios para explicar que es fascista y socialista, como ha reconocido para El Español. Aquí tuvo la oportunidad de matizar sus palabras: "No me refiero al pobre señor [el judío] que va a la sinagoga a rezar, me refiero al sistema monetario internacional, al sistema de reserva federal, a los líderes y organizaciones sionistas que subvencionan y financian el Black Lives Matter o el feminismo posmoderno", explicó.
En cuanto a su ideología, Peralta contó que defiende "un régimen de entraña nacional profunda y grandes perspectivas sociales. O, si prefieres, un régimen socialista", y define así lo que piensa: "soy nacionalsocialista en ideología, pero me defino como fascista porque mi referente en España es Ramiro Ledesma Ramos, fundador de la JONS y del fascismo nacional". Ramiro Ledesma Ramos fue director de 'La conquista del Estado', seminario en el que se propugnaba una línea política en España similar a la nazi. Fue expulsado de las JONS en 1935 y detenido por milicianos socialistas y llevado a prisión. Poco después fue fusilado por el bando republicano.
Para Isabel, que estudia Historia en la Universidad Complutense de Madrid, un nacionalsocialista como ella es una persona "elegante, escucha a Wagner, no se dedica a hacer el macarra y el vándalo, sino que lucha por unas ideas y sigue firme a ellas".
Finalizaba esta entrevista aclarando también que "cuando hablo, hablo de verdad. Podrá parecer mal o bien, pero yo lo creo y asumo las consecuencias. No voy a pedir perdón porque realmente creo mis palabras". La Fiscalía Provincial de Madrid ha anunciado que investigará las proclamas antisemitas efectuadas en el homenaje a la División Azul, ya que consideran que pudieran ser constitutivos de un delito relativo al ejercicio de los Derechos Fundamentales y las Libertades Públicas.
Por otro lado, en una entrevista para El Mundo, Isabel también ha contado que se enamoró del fascismo a los 13 años, y que no cree en la democracia. Se ha declarado admiradora de Hitler y negacionista del holocausto. En esta entrevista, también, ha comentado que sus padres ya no le dirigen la palabra.