Ver a los abuelos en residencias o bañarse en la piscina: guía en la fase 2 para avanzar sin liarla

¿Qué se puede hacer en tu provincia si ya has entrado en la fase 2?
Estas son las nuevas normas que implica esta fase intermedia de la desescalada
Pasito a pasito vamos avanzando en la desescalada. Lo que se ha alcanzado ahora es una etapa intermedia con la fase 2 de desconfinamiento que nos trae algunas novedades respecto a lo que se tenía conquistado ya en la fase 1. El nuevo salto que se ha dado y que afecta al 47% de la población (salvando la Comunidad de Madrid, Barcelona y Castilla León al completo, que estrenan la ansiada fase 1), supone una prueba decisiva para unos 22 millones de habitantes.
Lo que pasa ahora es que con los permisos y nuevas libertades nos estamos empezando a hacer un lío. Ya hay cosas que no sabemos si se pueden hacer o si a lo mejor estamos corriendo mucho. De los primeros paseos tímidos que iniciamos en compañía y salidas a terracitas en las que no se podía juntar más de 10 personas, ahora aumenta el número. Pero, ¿a cuántos? ¿Qué más se puede hacer? ¿Y qué no? ¡Nosotros te lo explicamos!
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¿Qué se puede hacer en la fase 2?
Por mucho que nos lo dicen, siempre nos quedan dudas. Y es que un plan tan meticuloso con fases y que es diferente ya para unas provincias y otras es como para no liarse. Sin embargo, la fase 2 cuenta con unas medidas de alivio y libertades distintas que hay que conocer para no meter la pata. Por un lado ya teníamos reuniones sociales, pero ahora aumenta el número de personas y también asistimos a la reapertura de espacios culturales y centros comerciales. ¡Eso es para celebrarlo!
Muchas veces por desconocimiento nos equivocamos, pero esta desescalada la queremos hacer bien. Después del encierro es la siguiente prueba de fuego que nos pone el coronavirus por delante. Y si ya hemos aprendido que esto se vence con solidaridad colectiva, no podemos olvidar que tenemos que seguir cuidándonos para cuidar al resto. Las normas que se ponen son para todos.
Esto a nivel individual, sigue manteniéndose en la distancia social, mascarilla obligatoria, higiene correcta de manos y desinfección de ropa y zapatos. Si notamos síntomas como tos o estornudos, lo tenemos que hacer sobre el codo, y si aparece fiebre y cansancio, tocará llamar al teléfono de atención de tu ciudad o comunidad. La precaución y aislamiento siguen siendo el mejor remedio para todo.
Ahora bien, en la fase 2 se amplían los contactos, de las terrazas de los bares podemos pasar sentados a las mesas de dentro (todavía no se permite estar en las barras), visitar a nuestros abuelos en las residencias, bañarnos en piscinas públicas y en esta fase abren ya los cines, teatros y auditorios. Pero vayamos por partes:
Reuniones sociales en grupos más amplios
Sin olvidarnos de los dos metros de distancia que eso lo tenemos que tener grabado a fuego prácticamente en toda la desescalada, en la fase 2 nos podemos ya reunir con más personas. Del número máximo de 10 integrantes de un grupo que se permitía en la fase 1, se pueden ya juntar hasta 15 personas en una casa o en una terraza al aire libre. Ya no existen franjas horarias y estas actividades (que tampoco antes estaban sujetas a horario) así como los paseos o deporte se pueden hacer exceptuando los tramos horarios para los paseos de ciudadanos mayores y vulnerables. Para el resto ya no hay horarios ni la limitación del kilómetro.
Otra de las grandes novedades que nos trae la fase 2 en lo que a las reuniones sociales se refiere es que ya se permiten celebrar bodas, aunque estas tengan un carácter más íntimo. El aforo será del 50% y nunca podrán superar los 100 invitados en espacios al aire libre o los 50 en espacios cerrados. Las concesiones también afectan a los velatorios que aumentan a reuniones de 25 personas y a la mitad ya del aforo en los lugares de culto (antes era solo un tercio).

Visitas a los abuelos en residencias
Este punto ha traído alguna que otra controversia, pero finalmente el Ministerio de Sanidad ha quitado las excepciones, salvo que en la residencia haya algún caso de COVID-19 o residentes en cuarentena. Seguramente que después de haber visto a la familia y amigos, lo que más necesitemos ahora es ver a nuestros abuelos. La buena noticia de la fase 2 es que ya es posible hacerlo, pero no se nos puede olvidar lo de las distancias de seguridad (2 metros) aunque nos cueste especialmente con ellos. La pandemia nos ha enseñado a que ahora la mejor forma de querer a los demás es poner distancias de por medio y más si estos son personas de riesgo. El achuchón que les queremos dar tendrá que esperar un poco más.
Los centros comerciales abren y de las terracitas pasamos al interior de los restaurantes
Tal vez lo que nos llame más la atención de esta fase intermedia sea que después de dos meses los centros comerciales abran sus puertas, aunque les queden todavía algunas libertades pendientes. Por ejemplo el aforo estará limitado al 40% y no se podrá estar en las zonas de ocio. Para los mayores de 65 años habrá un horario preferente y como siempre estará todo bajo el estricto control de las medidas higiénicas.
También en los mercadillos al aire libre se amplía la capacidad de puestos a un tercio de los habituales, y es tiempo para que las autoescuelas o academias privadas comiencen otra vez con sus clases.
Lo mejor de todo es que en esta fase se conseguirá un poco más conquistar el tapeo en los restaurantes. Ya no solo tendremos a nuestra disposición las terrazas, sino que también podremos sentarnos en las mesas del interior que con los calores que se echan encima no es ningún mal plan para las reuniones sociales.

Si por otro lado os apetece plan de hotel para descansar dentro de la provincia, tendréis que saber que ya se puede salir de la habitación y pasearse por las zonas comunes (siempre con mascarilla y todas las medidas higiénicas). La cafetería y restaurante tendrán las mismas restricciones que las que se están empleando para los bares de la calle. Cero aglomeraciones, distancias entre mesas y el no acceder a las barras.
Asistir a los esperados cines y teatros
¡Esto nos viene a cambiar un poco más la vida! Nuestro ocio empieza a tener más sentido ahora que en la fase 2 nos abren los cines, teatros y auditorios. Ya podíamos ir a bibliotecas y museos, pero tenemos pendientes muchos estrenos de la cartelera y estamos deseando sentarnos en las butacas. Eso sí, de cara al cine hay normas para estos nuevos accesos. Por lo pronto el aforo es de un tercio y las butacas se tendrán que reservar previamente. No puede haber aglomeraciones en las entradas.
En caso de querer ir al teatro o asistir a espectáculos culturares estos deberán acoger a menos de 50 personas en lugares cerrados y a menos de 400 al aire libre, siempre y cuando sea con el público sentado y manteniendo la distancia suficiente.
Estreno de piscinas y playa para la temporada de verano
A tiempo han llegado las concesiones en lo relativo a las piscinas y playas. Cuando empieza a pegar fuerte el calor nos vamos acercando a esta orilla. Si en la fase 1 las provincias que tenían playa se podía acercar uno al paseo marítimo, ahora se puede dar el deseado chapuzón, aunque siempre a nivel individual y sin contacto físico con los demás.
Las provincias que no tiene playa (¡vaya, vaya!) tendrán la opción de las piscinas, pero aquí habrá cita previa y un aforo máximo del 30% para que se cumpla la distancia de seguridad. De casa habrá que venirse duchados porque los vestuarios estarán cerrados y se organizará todo por turnos.
Los viajes en coche ¿con cambios?
Para los que quieren moverse fuera de su provincia tienen que saber que la fase 2 no es la correcta. Para eso tendrán que esperar a la 3 y a alcanzar la totalidad de esa 'nueva normalidad'. Lo que sí se nos deja en esta etapa intermedia es ir en un mismo coche personas que no han convivido juntas a diferencia de la 1 en la que todos tenían que ser convivientes. La manera de hacerlo es muy simple: podrán viajar dos por cada fila y siempre con la mascarilla puesta. Esto último ha llegado para quedarse entre nosotros en esta nueva etapa.