Como muchas otras influencers que quieren visibilizar este problema, Carla Flila ha publicado un vídeo a cara lavada en el que muestra el problema de acné que está teniendo. Desde hace cuatro meses, percibió la aparición de algunos granitos en su barbilla y el brote ha ido creciendo hasta tomar la decisión de someterse a un tratamiento específico. El acné es una afección muy común entre la gente joven, debido a los cambios hormonales propios de la edad (e inevitables), sobre todo en las mujeres.

En un valiente gesto, teniendo en cuenta la exigencia física de las redes sociales, la influencer ha expresado lo mal que se siente por culpa de las espinillas: "Me crea mucho complejo y parecerá una tontería estar llorando por esto, pero me afecta mucho a la autoestima", dice, entre lágrimas, aunque con la seguridad de que ya se ha puesto en manos de un dermatólogo que la va ayudar con su diagnosticado "acné hormonal".

Carla no es ni la primera ni la última creadora de contenido que visibilizado este problema cutáneo. Hace pocos días, Marta Díaz publicaba el antes y después de su piel, después de haber dejado de usar, de forma compulsiva, productos contra el acné. Su piel empezó a mejorar considerablemente cuando se negó a seguir obsesionándose por los granos, aunque es difícil que no afecten al autoconcepto de quienes los padecen.

Sofía Surferss, la hermana de Lola Lolita, también ha sufrido los estragos del acné y, con el paso del tiempo, su piel se ha recuperado por completo. Todas las influencers que han pasado por ello, aseguran que, dentro de lo malo, es algo pasajero y recuerdan que es mejor no aspirar a tener una piel perfecta, porque "no existe". Ahora, Carla empieza la medicación que le han prescrito con la (paciencia) y esperanza de que, en unos meses, los brotes hayan desaparecido.