Todos los turistas que se encuentran en Tailandia en los días de luna llena tienen la obligación moral de acudir a la Full Moon Party que se celebra una vez al mes en la isla de Koh Phangan. Esta conocida celebración tiene su origen en los años '80, cuando unos mochileros decidieron hacer una fiesta en torno a la fase completa de la luna; fiesta que, con el paso del tiempo, se ha ido agrandando y se ha convertido en una auténtica tradición, con el color flúor como principal etiqueta.

La Full Moon Party es un lugar de encuentro para todos aquellos que quieran disfrutar de la música de DJ's en directo (cada bar pone un escenario con su propio DJ y los asistentes van pasando de uno a otro al gusto) y donde se hacen performances y espectáculos de fuego durante toda la noche. Sin embargo, nadie se imaginaba que este 2023, iba ser el escenario de un presunto post crimen cometido por el español Daniel Sancho, hijo del conocido actor Rodolfo Sancho.

Allí fue donde, según informan fuentes tailandesas, acudió Daniel después de haber asesinado presuntamente al cirujano colombiano con el que, horas antes, le habían visto recorriendo la zona en una motocicleta. El hijo de Rodolfo Sancho se encuentra detenido y, tras haberse encontrado en su habitación de hotel "partes" del cuerpo de Edwin Arrieta, se confesó "culpable" de los hechos; si bien es una declaración de la que, posteriormente, se puede retractar.

Supuestamente, el joven chef, que llevaba en Tailandia desde el pasado 31 de julio, apareció en la bautizada como "la mejor fiesta playera del mundo" de la mano de dos mujeres que había conocido en el hotel. Después, se dirigió a una comisaría para denunciar la desaparición de su amigo Edwin pero, tras ser interrogado por la policía, fue detenido.

La explicación que Daniel ha dado sobre el presunto asesinato es que Edwing le tenía "amenazado" y que, con el disfraz de los negocios, lo que buscaba era coaccionarle para que fueran pareja. Rodolfo Sancho ya está viajando a Tailandia para encontrarse con su hijo en la cárcel y, en un comunicado, ha pedido "respeto" para toda la familia.