El Xokas es uno de los streamers españoles más conocidos, pero también uno de los más polémicos. En los últimos meses, ha sido el protagonistas de infinidad de titulares y debates en las redes sociales precisamente por ello.
Ahora, el streamer gallego ha ido como invitado al podcast de Nil Ojeda, Werlyb y Goorgo 'Club 113', donde ha querido sincerarse y hablar abiertamente de las polémicas más fuertes que ha protagonizando y ha explicado cuáles han sido las que más le han afectado y por qué.
A pesar de los años que el Xokas lleva creando contenido en internet, son muchas las personas que lo conocen por sus últimas polémicas; sobre todo por sus declaraciones en las que aseguraba que uno de sus amigos aprovechaba el hecho de ser abstemio para liarse con chicas más guapas que él y que habían bebido: "Claro, una tía que generalmente te vería como un cuatro te ve como un siete porque está colocada. Igual que tú, que a una tía que verías como un cuatro la vez como un siete, pues es mucho más fácil y tú encima estás sereno, mides perfectamente tus palabras, chupado, en vez de estar babeando y cayéndote contra la columna".
"Me jodieron en las que la gente tenía razón", ha asegurado el streamer que no ha dudado en reconocer que él se ha equivocado en muchas de sus polémicas, que él ha tenido la culpa y que no siempre lo ha hecho bien: "Por ejemplo cuando me hice cuentas en Twitter para contestar a retrasados o como cuando hice el comentario de mi colega que es abstemio y sale sin beber, esa fue la que más me jodió".
El Xokas admite que en ese momento lo que quería era transmitir un mensaje positivo en contra del consumo de alcohol, pero que se explicó mal: "Lo expliqué de una forma que parecía que mi colega le metía una botella a la tía y la arrastraba del banco".
También le molestó mucho que el Ministerio de Igualdad hiciese, en una de sus campañas, una referencia a este comentario del gallego: "Eso me ha destrozado, me ha destrozado porque eso lo han visto los padres de mis amigos, ¿entiendes? Eso es durísimo para mí porque es un mensaje tan bueno, tan mal explicado...".
Es más, insiste en que lo que más le molesta es que le "funen" con razón, como ese día, que él quiso transmitir algo bueno, pero lo explicó mal. Cuenta incluso que los meses siguientes a esa polémica y a la campaña del ministerio fueron muy duros para él a nivel mental, y decidió que tenía que apoyarse en su psicóloga, algo que le ayudó cuando tuvo depresión "y sabía que me iba a volver a ayudar el hablar con alguien sin filtro y que no me fuese a juzgar".