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La astronauta Sara García revela cómo orinan los hombres y mujeres en las misiones Apolo: "Es curioso"

  • Sara García Alonso es la primera astronauta española de la ESA

  • Estudió biología molecular y sus hobbie fav es el ganchillo

  • Ha dado una entrevista muy interesante en 'Estirando el chicle'

La mayoría de los niños pequeños sueñan con ser astronautas. Es un clásico. Pero muy pocos de ellos (y ellas) lo consiguen de verdad. En nuestra sociedad, no existe una carrera concreta para ser trabajador del espacio, sino que, tal y como ha explicado Sara García Alonso en 'Estirando el chicle', existen muchas vías en el ámbito de las ciencias de llegar a ese difícil objetivo. ¿La clave? Tener un buen coco, encontrar la oportunidad y aprovecharla, como hizo ella.

En el año 2021, cuando ya había terminado la carrera de biología molecular, vio una oferta de la Agencia Espacial Europea en la que se buscaban mujeres para ir en misión a Marte. Tuvo que dedicar mucho tiempo a prepararse para estas pruebas de acceso y, finalmente, fue aceptada, convirtiéndose en la primera mujer española en formar parte del elenco de astronautas de la ESA.

"Hay mucha testosterona en las misiones Apolo"

Todo el mundo la reconocerá por ser la chica del pelo naranja que protagoniza un anuncio en el que anima a otras mujeres a estudiar ciencias; si bien, los puestos de responsabilidad más importantes en las investigaciones científicas siguen estando ocupados por hombres. Así lo denuncio durante su divertida charla con Victoria Martín y Carolina Iglesias, que estaban muy interesadas por saber cómo van los astronautas al baño cuando están en pleno vuelo interestelar.

Su respuesta ha revelado que la fragilidad del ego masculino alcanza niveles extraterrestres: "Hasta que llegas a la Estación Internacional, donde ya te vistes con normalidad, las mujeres llevan unas compresas para hacer sus necesidades y los hombres unos preservativos, unidos una cánula. El tamaño de los condones era pequeño, normal y grande pero, como los astronautas masculinos de la misiones Apolo no estaban de acuerdo, la NASA tuvo que cambiarlos a talla extragrande, inmensa e increíble". Y así se denominan hasta ahora.