Aunque no es la primera vez que Ibai Llanos se pone a dieta, sí es la primera vez que enfrenta a una dieta en ‘modo toro’, es decir, sin tirar la toalla ni darse por vencido porque se la haya saltado uno o dos días. Ahora, siempre encuentra motivación para reconducirse y volver a su rutina de “vida saludable” y mucho más cuando tiene un gimnasio en su propia casa.
Con este pensamiento, el streamer ha conseguido bajar 7 kilos de peso, sin tener la pretensión de “batir ningún récord mundial”, ni la necesidad de perder 50 kilos en un abrir y cerrar de ojos. El objetivo de Ibai es tener “buenos hábitos” porque, durante toda su vida, ha tenido “un problema con la alimentación”, tal y como confesó en Tiktok: “Mi estómago era como una discoteca en la que siempre había fiesta y, ahora, esa discoteca ha chapado. A mí me cabía todo”.
Parte de su ‘terapia nutricional’ es la construcción de un gimnasio en la segunda planta de su casa, al que no le fata de nada: elíptica, pesas, barra, bicicleta estática… y, aunque sabe que no todo el mundo tiene “el dinero ni el espacio” para montarse una sala de entrenamiento así, ha animado a todo el mundo a hacer deporte de manera constante.
Tener el gym en tu propia casa anula la típica excusa de “es que no me ha dado tiempo a ir” y, además, te libra de algo que era importante para Ibai: “A mí me daría vergüenza ir a un gimnasio público”, ha dicho en su canal de Youtube, donde también le hemos visto estrenar sus nuevas máquinas junto a su entrenador personal.
Aunque sí ha trabajado con mancuernas y todo tipo de materia, ni el cuerpo ni los pulmones del famoso streamer están acostumbrados a estas máquinas, por lo que tendrá que ir forzando sus músculos poco a poco para evitar lesiones.