“Yo me conformo con poquito, que tanto no necesito, que esta flor siempre sintió algo bonito, pero yo también me marchito” es la letra de la canción que está escuchando Sara Carbonero en el hospital, según ha publicado ella misma en su Instagram.

Esa ha sido su primera reacción en redes después de que saltara la noticia sobre su ingreso inmediato, que sus médicos le aconsejaron tras someterse a una revisión de su tumor maligno de ovario en la Clínica Universitaria de Navarra. La expresentadora de Informativos Telecinco, que en 2019 anunció que padecía cáncer, fue operada de urgencia en Madrid y, convaleciente, se ha puesto a escuchar ‘Poquito’, un tema de Valeria Castro, bautizada como una de las mejores cantautoras del momento.

Valeria es una joven de 23 años con raíces canarias que se ha hecho a sí misma. A los 10 años supo que quería ser cantante y, gracias a la difusión de las redes sociales y a la suavidad de su voz, consiguió llamar la atención de artistas de la talla de Alejandro Sanz y La Oreja de Van Gogh con la publicación de sus covers. Su primer disco se llama 'Chiquita' y 'Poquito' ya está disponible en todas las plataformas digitales.

Desde que la escuchó por primera vez, Sara Carbonero se quedó totalmente prendada de voz de terciopelo. La periodista tuvo la suerte de conocerla en un programa de radio y esto fue lo que dijo de ella:

"Un día escuchas una voz y una canción que te abriga como hacía tiempo que nada lo hacía y otro tienes la suerte de estar sentada con su autora, disfrutándola en acústico a menos de un metro de distancia", añadiendo que daba las gracias porque "existan mujeres como ella". Por eso, no es de extrañar que la haya elegido como compañera del duro momento que está viviendo, además de contar con la presencia en el hospital y el apoyo incondicional de su madre y de su gran amiga, Isabel Jiménez.

Hace unas semanas, vimos a Sara acompañando a otra persona que sabe muy bien lo que es el cáncer: Elena Huelva, la joven influencer que lucha contra un sarcoma de Ewing desde hace cuatro años. Ambas estuvieron juntas en Sevilla tras haber forjado una amistad más fuerte que su enfermedad.