Los mensajes subliminales ocultos en 'Toke': Chanel responde a la prensa y a los haters con su videoclip

Ahora que, por fin, se ha hecho pública la lista definitiva de los 18 participantes del Benidorm Fest 2023, hay un eurofan que se ha acordado de lo mal que lo pasó Chanel Terrero durante el mismo certamen del año pasado. La flamante ganadora de 2022, que con su ‘Slomo’ consiguió un insólito tercer puesto para España en Eurovisión, fue el foco de duras críticas por haber sido elegida como la favorita de la organización, pero no la del público. 

De Chanel se dijo de todo: recibía mensajes racistas y sexistas, por su vestimenta y su origen latinoamericano. Ella mismo tuvo que publicar un tuit advirtiendo al mundo de la fragilidad de la salud mental de cualquier artista, pero no sirvió de nada. Solo consiguió ‘callar bocas’ cuando, con su espectacular performance en Eurovisión, le devolvió a España la dignidad que había dado por perdida en el concurso.

“Yo estoy al mando papi, no te equivoques”

Por todo ello, un tuitero se ha puesto a mirar con lupa el nuevo videoclip de Chanel, Toke, que acaba de salir. Y lo que ha encontrado no es ninguna tontería y que ella misma compuso durante la polémica. La cantante ha aprovechado su segunda puesta en escena para plantarle cara a sus haters y a la prensa, que tanto daño le hicieron.  

En este vídeo musical, todo tiene importancia: desde los detalles aparentemente insignificantes, como el outfit multicultural que lleva la protagonista – casualmente, su top lleva los colores de la bandera de España, el país al que pertenece, le pese a quien le pese –; hasta otras performances más evidentes, como la coreografía de los cuernos, que podría ser una mezcla de nuestra cultura taurina y un contundente “iros todos a tomar vientos”. 

Como bien observa este eurofan, hay dos escenas especialmente llamativas: la de un grupo de jóvenes, que previamente le habían clavado la mirada, zarandeando su coche en actitud muy peligrosa; y la de la caída en la escalera, donde Chanel lleva un vestido rojo rasgado que emula a su propia sangre y que la prensa aprovecha para fotografiar, sin ayudarla. 

Estas imágenes van hermanadas con la letra de la canción, que también deja claras sus intenciones con frases como: “No pidan que le baje, estoy en mi viaje y no voy a bajar”, “Subo como ascensor” o “Yo estoy al mando papi, no te equivoques”. Dicho queda.