Con 8 meses de vida, aún el nombre del bebé es una incógnita, incluso para sus padres. El pasado 2 de febrero, Kylie Jenner y Travis Scott dieron a luz por segunda vez y desde ese entonces no han definido el nombre de su retoño. Pese a que los primeros días de vida le asignaron el nombre "Wolf Webster" a las pocas semanas, la influencer compartió al mundo en un comunicado que "no sentía que era el nombre adecuado para él" y decidió dejar de llamarlo así. Hoy, muy cerca de su primer año de cumpleaños aún reina la incertidumbre sobre su identidad.

Fue en uno de los últimos episodios de la serie 'Keeping up with the Kardashians' en donde la empresaria volvió a traer sobre la mesa este tema con su madre, Kris Jenner. En la charla le confesó que apenas dio a luz decidió nombrarlo así por haberse sentido "presionada": "Realmente no teníamos decidido un nombre, pensamos que nos iba a venir cuando lo vimos y no fue así. Entonces teníamos que firmar el acta de nacimiento, o lo registraban sin nombre ni número de la Seguridad Social, así que sentí la presión de elegir un nombre”, confesó la joven quien aseguró que nunca le gustó su primera elección.

En medio de papeleríos y trámites comunes de un recién nacido, el "sistema" puso a la influencer entre la "espada y la pared" a la hora de nombrar a segundo hijo "rápidamente" para registrarlo el acta de nacimiento, pero no fue hasta que lo vio en escrito sobre papel que decidió que había cometido una equivocación: "Ponemos Wolf Webster en ese momento y justo después de que firmé el certificado de nacimiento pensé, ¿Qué acabo de hacer?”, recordó.

Actualmente, ante "los ojos de la ley" el pequeño se llama "Wolf" pero no es así como lo llamarán en el seno familiar. Como broma interna que tiene la pareja Jenner-Scott, ambos entre risas dictaminaron que debía ser el propio hijo quien eligiera la manera para llamarse, pero son conscientes de que aún estamos a años luz para que el recién nacido aprenda a hablar. Es por ello que no pasará mucho hasta que salga a la luz la nueva elección.

Dentro de los temas que han floreciendo sobre el segundo nacimiento de su hijo ha sido la depresión post parto que Kylie confesó tener. Hace un par de meses, la joven contó en uno de los capítulos, lo "cuesta arriba" que se le ha hecho su segunda maternidad, a diferencia de cuando tuvo a Stormie y recordó el padecimiento que vivió en las primeras semanas luego de dar a luz: "Lloré 3 semanas sin parar".

En este plano, un tiempo después de confesar en televisión su depresión, la menos del clan Kardashian publicó en su cuenta de Instagram las dificultades a las que se enfrentó a nivel emocional y corporal a modo de visibilizar un problema con las que muchas mujeres lidian y que poco se habla: "Cuatro meses de posparto. He estado lidiando con toneladas de dolor de espalda y de rodilla esta vez, así que ralentiza mis entrenamientos", publicó y añadió, "Esta experiencia para mí, personalmente, ha sido un poco más difícil que con mi hija. No es fácil mental, física y espiritualmente, es una locura. Solo quería volver a mi día a día contándolo porque creo que otras mamás que están pasando por lo mismo en este momento pueden buscar en Internet y ver que parece mucho más fácil para otras personas, y se sienten presionadas, pero no ha sido fácil para mí", concluyó.