Laura Escanes y Risto Mejide han roto su relación después de siete años juntos, una hija en común, una boda de por medio y un podcast que grabaron poco antes de separarse. Muchos se han sorprendido al conocer la noticia porque hasta hace muy poco presumían de amor en Instagram, la misma red social en la que anunciaron su ruptura.

Tras difundir un comunicado en el que se despedía del padre de su hija, Laura desapareció de las redes durante poco más de 24 horas, para reaparecer con unos stories en los que aseguraba que estaba "bien rodeada" por sus amigas, las también influencers María Pombo, María Fernández-Rubíes y Laura Matamoros, que se reunieron en casa de esta última para comer.

En las puertas de la casa de la hija de Kiko Matamoros, María Pombo y María Fernández-Rubíes han atendido a Europa Press y se han pronunciado por primera vez acerca de la ruptura de su amiga con el presentador de 'Todo es mentira'. La pequeña de las hermanas Pombo ha confirmado que las amigas son muy importantes y que han estado apoyando a Laura, aunque no ha querido mojarse sobre mucho sobre el tema por miedo "a cagarla".

"Son momentos complicados para la pareja", ha asegurado María Pombo, que no ha dado más declaraciones acerca del tema. Por su parte, María Fernández-Rubíes ha confirmado ve "tranquila" a Laura, que ya se encuentra buscando piso y lo estaría haciendo, según ha publicado la revista '¡HOLA!', con la ayuda del marido de María Pombo, Pablo Castellano, que regenta junto a su hermano una empresa de construcción, Grupo Archarray, centrado en reformar viviendas.

La misma revista ha publicado en su versión web que Laura Escanes les ha explicado que ni Risto Mejide ni ella van "a dar ninguna declaración más". "Son momentos delicados y ya está. Pedimos un poco de calma y ya está", ha rogado la influencer, que ante los medios que le han preguntado en la calle ha asegurado que entre ella y el padre de su hija "está todo bien" y "hay buena relación".

En sus redes sociales, la catalana ha mostrado que, tras la comida con sus amigas, acudió con una de ellas, Gemma Pinto, a hacerse un tatuaje a juego: un planeta con un anillo que ambas lucen en sus antebrazos; y ha compartido un vídeo en el que aparece abrazando a su hija, Roma, que tiene tres añitos y acaba de empezar el colegio.