Patricia Sornosa ha hablado por fin en un medio de comunicación sobre su polémica presencia en el programa "Estirando el chicle". La popular humorista, una de las voces del feminismo transexcluyente más reconocidas en nuestro país, ha participado este martes en el programa "La Tarde" de COPE para dar su versión del "acoso" que ha sufrido en redes sociales en estas últimas semanas por su presencia en el famoso podcast. "El público que escucha el programa se enfadó mucho por mi mera presencia. De hecho, las presionaron (a Carolina Iglesias y Victoria Martín) para que el capítulo no se emitiera. El podcast vio finalmente la luz, pero no en Youtube", ha dicho.

Patricia admite que siempre se ha expresado "con claridad" sobre la ideología trans y que de sobras es sabido lo que piensa. "Lo que molestó fue mi presencia en un programa en el que se suponía que yo no podía estar, no sé por qué", ha dicho.

Junto al presentador Fernando de Haro, Patricia ha defendido una vez más que el sexo es inmutable. "Sostener cosas tan evidentes como que el sexo existe supone una ofensa a un credo que no acabo de entender. La gente reacciona con fiereza y no entiendo el motivo", ha dicho.

Para ella, el sexo "es algo palpable y se puede comprobar científicamente". "El género son estereotipos sexistas que suponen una gran esclavitud mental para las mujeres y para los hombres. Todas esas cosas que se suponen que tenemos que hacer por un determinado sexo. Que se intente que esta esclavitud se convierta en una identidad y que tú puedes elegir tu cárcel, a mí me parece un error", ha dicho.

Patricia sostiene que una persona puede cambiar su "apariencia", pero que el sexo es binario y no se puede modificar. "El sexo no se asigna al nacer, el sexo se observa. Las mujeres tenemos una gran importancia en la existencia y eso se intenta controlar", ha dicho.

Además, Patricia rechaza que sea tildada como tránsfoba por sus ideas porque ella no hace daño a las personas transexuales. "Antes, para ser tránsfobo tenías que causar un daño real. Ahora, casi todos los tránsfobos somos mujeres que nos cuestionamos los roles de género. Ha cambiado el significado y se ha banalizado", explica.

Por último, Patricia ha denunciado que ya ha sufrido varias "campañas de acoso" y sabe lo duro que es que "te señalen". "Yo sólo cuestiono ideas", ha concluido.