Una venganza en toda regla. El ex esposo de Britney Spears, Kevin Federline, ha publicado en internet una serie de videos antiguos donde se ve a la cantante discutir con sus dos hijos en unas grabaciones íntimas y que pertenecen al más estricto ámbito privado y familiar.

K-Fed, que estuvo saliendo con la princesa del pop desde 2004 hasta 2007, compartió tres videos de Instagram el jueves que aparentemente muestran a Britney Spears regañando a sus hijos, Sean y Jayden. “No puedo sentarme y dejar que mis hijos sean acusados de esta manera después de lo que han pasado. Por mucho que nos duela, decidimos como familia publicar estos videos”, escribió Federline junto a los clips, diciendo que sus hijos tenían 11 y 12 años en el momento en que se tomaron los videos. “Esto ni siquiera es lo peor”, continuó. “Las mentiras tienen que parar. Espero que nuestros hijos crezcan para ser mejores que esto”.

En el primer video, la cantante aparentemente no se da cuenta de que uno de sus hijos la está filmando cuando entra en su habitación. “Esta es mi casa”, les dice. “Si quiero entrar aquí y daros loción para la cara porque esta áspera lo hago. Es mejor que empecéis a respetarme, ¿está claro? Debéis tratarme bien", les dice.

El segundo clip, también aparentemente tomado sin el conocimiento del cantante, muestra a Britney Spears supuestamente gritando a su hijo en el interior de un vehículo: “¿Has perdido la cabeza? ¿Has perdido la maldita cabeza?” La cantante parecía molesta porque su hijo Sean había entrado en una tienda sin zapatos. Como castigo, ella le dijo que le quitaría el teléfono. “Estoy en shock contigo y no sé qué hacer. “Y te tengo miedo porque estás raro y estás pasando por la pubertad. Y no sé qué decir. Pero me importas más de lo que crees", señala.

Esta reacción de Federline se produce pocas horas después del ataque que Britney publicó en Instagram el miércoles, donde calificó la conducta de sus hijos, que ahora tienen 15 y 16 años, de "odiosa". En la publicación la cantante aseguró que sus hijos nunca querían pasar tiempo con ella cuando la visitaban. Tampoco fueron a su boda con Sam Asghari por decisión propia.

Sean Preaston y Jayden James, los únicos hijos de Brintey, parece que no quieren mantener contacto con su madre en este momento. "Los chicos han decidido que no la van a ver. Han pasado unos meses desde que la vieron. Tomaron la decisión de no ir a su boda", ha asegurado Federline en una entrevista. De sus comentarios en el tabloide británico también se desliza que los hijos de Spears se estarían avergonzando del comportamiento de su madre en redes sociales, especialmente de sus desnudos integrales.

Britney Spears ya ha reaccionado a la última maniobra de su expareja para manchar su honor y dejarla como mala madre. "Me apena escuchar que mi exmarido ha decidido hablar públicamente sobre la relación que existe entre mis hijos y yo. Como todos sabemos, criar a niños adolescentes no es fácil para nadie", ha respondido.