La guerra entre Chris Rock y Will Smith no tiene fin. Meses después del puñetazo que el actor dedicó al humorista en plena gala de los Oscar, las espadas siguen en alto y ni siquiera el intento de acercar posturas de Will Smith parece poner fin a esta mediática polémica. Este fin de semana, el intérprete subió un vídeo a sus redes sociales para disculparse por su airada reacción ante una broma de Chris Rock sobre la alopecia de su mujer. "Me comuniqué con Chris por mensaje y me respondió que no está listo para hablar y que cuando lo esté, lo hará. Así que Chris, te pido disculpas, mi comportamiento fue inaceptable y estoy aquí cuando estés listo para hablar", señalaba el actor.

En ese momento "no estaba pensando en cuántas personas resultaron heridas", destacó Smith, quien específicamente se disculpó con la madre y con el hermano del actor, Tony Rock, con quien tenía "una gran relación". "Era uno de los míos y esto probablemente es irreparable", agregó.

El actor admite que a día de hoy "no hay una parte de mí que piense que esa fue la forma correcta de comportarse" y reiteró que su mujer no le provocó para llegar a levantarse de su asiento, subir al escenario y pegar al cómico. "Estoy tratando de estar arrepentido sin avergonzarme de mí mismo. Soy humano y cometí un error, e intento no pensar en mí mismo como un pedazo de mierda", apuntó. Recordemos que Will Smith acabó ganando esa noche el Oscar al mejor actor protagonista, pero la Academia le retiró su membresía semanas después por lo acontecido.

Pese a las sinceras palabras de Will Smith, Chris Rock no está dispuesto a aceptar sus disculpas. Tan solo unas horas después de la publicación del vídeo, el cómico se subía al escenario en el Fox Theatre de Atlanta (Estados Unidos) para continuar con su gira de monólogos. Según cuenta la revista People en su página web, el humorista lamentó que todo el mundo esté intentando ser una víctima cuando él ha sido quien recibió el tortazo: "Todo el mundo está intentando ser una puta víctima. Si todos dicen ser una víctima, entonces nadie escuchará a las verdaderas víctimas", dijo al público sin referirse expresamente a Will Smith.

A continuación, el humorista comparó al actor con el jefe del sello discográfico Death Row Records, Marion Suge Knight, un hombre conocido por su duro carácter: "Incluso cuando Suge Smith me pegó un tortazo... fui a trabajar al día siguiente, tengo hijos". Y es que, tal y como asegura el humorista, un puñetazo en la cara duele más que cualquier palabra: "Cualquiera que diga que las palabras duelen nunca ha recibido un puñetazo en la cara". Según el productor de la ceremonia de los Oscar, Will Packer, la Policía de Los Ángeles se ofreció a arrestar a Smith, pero Rock rechazó presentar cargos contra el actor.