Rosalía ha reventado el hype con un adelanto de ‘Despechá’, una canción que nos hace salivar de gusto y promete muchas novedades en esta nueva etapa que está viviendo la cantante. En el horizonte tenemos el Motomami World Tour, que ha dado oficialmente el pistoletazo oficial de salida el pasado 6 de julio. Si descontamos las entradas a precio de sangre de unicornio, será el evento musical más importante que veamos en los próximos meses; una de las giras del año. Los fans han sentido un ligero pinchacito en la tarjeta de crédito, pero lo cierto es que no han protestado mucho.

Con tanto trajín, salto y canto, la reina de las Motomamis va a disponer de mucho menos tiempo para entregarse a una de las actividades que más le gusta: comer bien y en buen ambiente. ¿Sabías que le chifla escoger rincones con encanto?

El asunto de sus restaurantes predilectos y los lugares en los que le encanta mirar si la copa de vino está lo bastante limpia viene a cuento por una pregunta que le hizo un fan hace algunos días, después de que la catalana utilizara una de las clásicas herramientas de los famosos para interactuar con su audiencia sin mancharse mucho las manos. “Si tenéis una pregunta a lo mejor os respondo”, dijo la gran Motomami. Los fans, claro, frieron su cuenta a preguntas de todo pelaje, desde cuál era su horchata preferida a cómo lograba que se le ocurrieran ideas para canciones. Llegó otra, a bocajarro. “Fav restaurant”. Rosalía respondió con sus cinco lugares preferidos para el mangiare.

Está en pleno barrio de Gràcia y se caracteriza por un menú de sabores locales, con predominancia de la gastronomía catalana. Algo de cocina de autor también se impone, como el huevo poché con puré de alcachofa o un sushi prensado de anguila, aguacate y manzana.

No faltan platos clásicos que siempre son garantía de acertar con el tiro: croquetas variadas o el pescado y el marisco, buen producto sin sorpresas. El local cuenta además con una terraza interior, que Rosalía seguro que adora. Quizá ahora un poco menos. Haber desvelado este rinconcito seguramente hará que la afluencia de comensales aumente.

Un nombre sin muchos vuelos, que sin embargo esconde uno de los secretos mejor guardados de Barcelona: su espectacular tortilla de patatas. La gran Motomami fue taxativa al hablar de este rincón. “La mejor de Barcelona”.

Según dicen, el local es pequeño y acogedor, y está bajo la batuta de Aimar Córdoba. Buena parte de su oferta son ‘platillos’ y una lista de tortillas lo bastante variada como para echar unas cuantas horas probando las distintas iteraciones, desde la clásica a la de pimientos de piquillo o la de txaka (ensalada de cangrejo). Para acompañar, unos chipirones, y el combo de sabores estará completo.

No podía faltar en el gastrotour de Rosalía el toque internacional, el comodín entre comodines a la hora de elegir un sitio donde darle a las papilas gustativas sin culpa. Xemei es una de las referencias en la batería de restaurantes italianos que riegan la ciudad de Barcelona. A decir de muchos, estaría entre los cinco mejores.

Regentan esta hostería clásica los hermanos Colombo. En cuanto al menú, buen producto orientado a la cocina veneciana y pocas sorpresas (para bien), desde un delicioso vitello tonatto, spaghetti all nero di sepia o unos contundentes papardelle con ragú.

Lo pudimos ver hace tiempo en primicia gracias a una storie de Instagram que publicó la catalana cuando se metía entre pecho y espalda un guisote de pollo y varias tortillas mexicanas.

No es excesivamente caro, teniendo en cuenta la oferta amplia de platillos de cocina mediterránea y catalana. Cocina de mercado con muy buen producto que da lo que ofrece y donde se pagan con gusto esos 30 euros de media por comensal.

El último toque internacional, como no podía ser de otra manera, lo da un japonés. Morro fino el de la Motomami. Sushi y sashimi de alto standing en un local de alta cocina que, otra vez, habría que incluir en la lista de lo mejor de lo mejor de esta gastronomía en la ciudad.