Organizar un campeonato del mundo es un país que no respeta los derechos humanos sigue pasando factura a la FIFA. El portavoz del Mundial de Qatar, Nasser Al-Khater, amenazó este lunes con meter en la cárcel a los hinchas que porten banderas LGTBIQ+ en su territorio durante la disputada del torneo de fútbol. "Quien luzca la bandera en la próxima Copa del Mundo de fútbol será arrestado por 7 u 11 años", dijo en rueda de prensa. Además, recordó que Qatar es un país islámico y, por eso, se deben respetar su "religión, creencias y cultura".

Lo cierto es que la hostilidad contra el colectivo gay ya ha comenzado incluso antes de que el balón comience a rodar. Una investigación conjunta realizada en el norte de Europa (Noruega, Dinamarca y Suecia) reveló que algunos hoteles que acogerán a miles de turistas durante el Mundial no están admitiendo parejas del mismo sexo. Los que sí las aceptan han advertido que deben "evitar cualquier muestra de afecto en público dentro de las instalaciones".

Por este motivo, diferentes partidos políticos y asociaciones han pedido a España dar un paso adelante y defender los derechos LGTBIQ+ en un territorio hostil como es Qatar. El portavoz de la formación de izquierda Más País, Íñigo Errejón, ha pedido este martes que la selección española vista los colores del arcoíris en el Mundial en protesta por esta ley del país árabe que pena con la cárcel a quien exhiba banderas LGTBI+ durante la competición deportiva.

"Esto es una ofensa para los países en los que están vigentes esas libertades", ha denunciado Errejón en una rueda de prensa en el Congreso español coincidiendo con la celebración hoy del Día del Orgullo LGTBI. El diputado ha vuelto a alertar del peligro que supone celebrar competiciones deportivas en dictaduras religiosas que no respetan los derechos humanos. Y, por eso, ha resaltado que le gustaría que la selección española fuera un ejemplo y vistiera en el Mundial los colores del arcoíris, aunque solo fuera en el primer partido de forma simbólica. En su opinión, España demostraría así que es un país que defiende la libertad y que los españoles están orgullosos de defenderla "y no se pliegan al fanatismo de ninguna dictadura religiosa".

Qatar es un país que condena la homosexualidad. El sistema judicial catarí se basa en la Shari'a, por lo que "los actos homosexuales" se castigan de forma severa. Según el artículo 296 de su código penal, las penas a las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo van desde prisión de 3 a 5 años o incluso la muerte, aunque no existen pruebas de que se hayan aplicado penas de muerte por relaciones sexuales consentidas en privado entre adultos del mismo sexo.

El mundial de Qatar, que se celebrará entre el 21 de noviembre y el 18 de diciembre de este año, será el primero que se celebre en el otoño del hemisferio norte.