María del Monte decidió esta semana contar públicamente que es lesbiana. Lo hizo durante el pregón que protagonizó en el Orgullo de Sevilla y ante miles de personas (la mayoría, muy jóvenes), que aplaudieron a la cantante tras dar ese importante paso. La folclórica rompía así con décadas de absoluto silencio sobre su vida amorosa en los que ella misma se mostraba esquiva, incómoda y a veces hasta agresiva cuando se le preguntaba por ello.

Ser homosexual para un cantante o un actor no es fácil. A lo largo de estos últimos años, hemos conocido casos de personajes públicos que han dado tardíamente el paso de salir del armario o de hablar sobre su orientación sexual. Las exigencias de mánagers, productoras o discográficas - que ven con miedo cómo su 'producto' puede devaluarse si no sigue un patrón de conducta cis hetero - ahoga la necesidad de libertad de estas personas tan expuestas, por otro lado, a la trituradora mediática.

David Lafuente fue miembro de Auryn, la boy-band más famosa de la industria española de este siglo XXI. Durante ocho años, el grupo vendió decenas de miles de discos e hizo giras multitudinarias. Hasta su separación en 2016, ninguno de sus cinco miembros habló abiertamente de su sexualidad. ¿Lo hacían por convicción u obligados?

En el programa Viernes Deluxe de Telecinco, Lafuente ha explicado que en la discográfica nunca le preguntaron si era gay, aunque él sí lo contaba a su círculo más íntimo. "En las entrevistas desviaba un poco el tema, jugaba con la ambigüedad", ha contado. A la pregunta de si el sello discográfico les obligaba a ello, Lafuente lo ha negado. Sin embargo, sí ha desvelado que todos tenían una cláusula que les impedía salir por lugares de ambiente. "No podía salir por Chueca, ni que me fotografiaran en lugares homosexuales o dándome un beso con alguien", ha admitido.

David ha explicado también que ya desde pequeño lo pasó mal por ser gay. "Tuve mala fortuna porque siempre había mucha fijación con este tema. Llegó a ser cruel", ha dicho. Al llegar en la adolescencia se rebeló y mudarse a Madrid le cambió la vida. Pero subraya: "Hoy en día, para la gente joven sigue siendo difícil salir del armario", explica.

No es la primera vez que Lafuente habla sobre lo duro que resultó para él estar en Auryn y ocultar su homosexualidad. En el año 2019, semanas después de salir públicamente del armario, señaló en Sábado Deluxe que empezar en el grupo fue como volver al armario. "No es que me lo prohibieran (decir que era gay), pero en cierto modo sí que era así. Yo entiendo que trabajábamos para un público femenino y había que mantener la imagen, pero...", señalaba. El joven asegura que intentó seguir siendo él mismo, aunque eso le trajo "problemas". "Era como la oveja negra, constantemente eran regañinas, me decían 'te han visto aquí, van a salir fotos, te han visto con alguien'. En cierto modo pasaba miedo", añadió. Esta situación tan incómoda le hizo acudir a terapia "durante muchos meses".

En noviembre de 2019, tres años después de acabar en Auryn, David decidió salir del armario presentando a su novio en Instagram. "Te quiero y sé que nos quedan muchos universos que mirar y lunas y mares que pisar. Ahora mi barco lleva tu nombre y quiero navegar hasta que los remos se partan, entonces nos dejaremos llevar, porque juntos, todo lo que venga será increíble. Y si ahora me deja de seguir gente por esto, adelante. El amor no se debe callar, el amor es para vivirlo y ser libres con él", decía. Actualmente, mantiene su relación sentimental con el también cantante Junior Ferbelles.

No todos los miembros de Auryn han seguido sus pasos. Blas Cantó también ha tardado un tiempo en decir públicamente que era gay. De hecho, sólo lo ha hecho de manera transparente hace escasos días con el lanzamiento de su tema "El bueno acaba mal", donde de manera oficiosa también sacaba del armario a su compañero Álvaro Gango. Sólo Dani Fernández, recientemente casado con su chica, no formaba parte del colectivo LGTBIQ+.

Carlos Marco, el único miembro de Auryn que sí ha sido un referente gay,  contradijo hace dos años a David Lafuente al asegurar en una entrevista a 20minutos.es que no existía ninguna cláusula que impidiera a los integrantes de Auryn salir por lugares de ambiente. "Éramos nosotros los que nos autolimitábamos. (...) A mí nunca nadie me ha dicho nada. De hecho, sería ilegal. Es una decisión personal que tu sexualidad la lleves abiertamente. Yo he vivido con total libertad mi experiencia y lo he contado cuando salía con un chico". Según él, la única cláusula un poco extravagante del contrato era "que no se podían cambiar el look sin avisar".